Madera, colores y acabados
En esta guía te ayudamos a elegir la madera y el acabado perfecto para tus instrumentos y accesorios. Ofrecemos maderas estructurales como el haya y el pino, y maderas decorativas como el roble, cerezo, wengé y sapelli, cada una con sus propias características. Además, podrás elegir entre acabados mate, satinado o brillante, aplicables tanto en barnices como en pinturas, para personalizar tu pieza según tus preferencias estéticas y funcionales.
Maderas Estructurales
Las maderas estructurales se utilizan principalmente en partes que, por lo general, van a ser pintadas o permanecen ocultas en la pieza final. Son maderas resistentes y estables, ideales para proporcionar la base sólida que necesita cualquier instrumento o accesorio.

El haya es una madera densa y resistente que se caracteriza por su color blanco-rosado y una textura fina y uniforme. Es muy apreciada por su estabilidad dimensional, lo que la convierte en una opción ideal para estructuras que necesitan una gran resistencia y durabilidad, como los marcos o bases de los instrumentos. Su superficie puede ser fácilmente tratada, y su acabado en mate o satinado resalta su belleza natural sin perder la resistencia que aporta a la pieza. Esta madera se utiliza por defecto para las estructuras interiores de las pedaleras.

El pino, por otro lado, es una madera más ligera y económica, con una tonalidad amarillenta o blanca, y una veta generalmente recta. Aunque no tiene la misma dureza que el haya, el pino es adecuado para estructuras que no estarán sometidas a un desgaste extremo. Además, es muy fácil de trabajar, lo que permite personalizar piezas con facilidad. Al ser más suave, suele ser más sensible a arañazos, por lo que los acabados mate o satinado son perfectos para proteger su superficie sin perder la suavidad al tacto. Esta madera se utiliza por defecto para las carcasas de las pedaleras.

El abedul, especialmente utilizado para los cascos de las baterías acústicas, es una madera ligera con una textura suave. Aunque no es tan densa como otras maderas, ofrece una excelente resonancia, lo que la hace ideal para la fabricación de partes de instrumentos que requieren ligereza y un sonido claro. Es una opción muy popular en la fabricación de componentes de baterías debido a su capacidad para producir un tono brillante y de buena proyección.
Maderas Decorativas
Las maderas decorativas se utilizan en las partes visibles de los instrumentos y accesorios, donde su belleza y textura juegan un papel clave en la estética final de la pieza. Además de ser resistentes, aportan una gran carga visual, destacándose por sus colores, vetas y acabados únicos.

El roble es una madera clásica de gran versatilidad, con una tonalidad que varía desde un marrón claro hasta tonos más oscuros con un patrón de vetas muy marcado. Es una madera resistente, lo que la convierte en una excelente opción para elementos decorativos, como los detalles en instrumentos musicales. Los acabados mate y satinado permiten que su textura y vetas naturales sean lo más destacado, mientras que un acabado brillante puede darle un toque más moderno y elegante, ideal para piezas que requieren una mayor protección. Se utiliza por defecto para las teclas blancas de las pedaleras.

El cerezo es otra madera muy valorada por su calidez, ya que su color varía con el tiempo desde un tono rojizo claro a un tono más dorado. Su textura es uniforme y bastante fácil de trabajar, lo que lo hace adecuado para detalles decorativos y superficies que no requieren una dureza extrema. Un acabado satinado o mate es excelente para resaltar su color sin perder su aspecto natural, pero también se puede optar por un lacado brillante para una apariencia más sofisticada. Se utiliza por defecto para las insignias de los cascos de batería.

El wengé es una madera exótica de color muy oscuro, casi negro, con un patrón de vetas muy distintivo. Es una opción perfecta para quienes buscan un acabado elegante, y su resistencia la hace adecuada tanto para detalles decorativos en instrumentos de alta gama. Debido a su color oscuro y su textura densa, un acabado brillante en wengé puede dar un aspecto lujoso y refinado, mientras que un acabado mate o satinado ayuda a suavizar su intensidad sin perder su carácter. Se utiliza por defecto para las teclas negras de las pedaleras

El sapelli, similar al roble pero con un tono más cálido, tiene una rica tonalidad rojiza que puede variar en intensidad. Esta madera africana es bastante resistente y se utiliza en aplicaciones decorativas donde se busca una gran presencia visual. El sapelli se ve impresionante tanto en acabados mate como satinados, que permiten que sus vetas resalten de manera elegante. Un acabado brillante también puede aplicarse para aportar un toque de distinción, sin perder la calidez de la madera. Se utiliza por defecto para los apoyamanos de fagot.

El iroko es una madera tropical, conocida por su durabilidad y resistencia. En la fabricación de instrumentos de percusión, el iroko se valora por su tonalidad cálida y su capacidad para producir un sonido profundo y resonante. Su gran firmeza permite que los instrumentos mantengan una excelente longevidad, resistiendo bien al desgaste. Además, su color y textura lo hacen estéticamente atractivo, lo que lo convierte en una opción popular para la creación de instrumentos musicales de alta calidad. Se utiliza por defecto para las claves.
Colores y Acabados
Los acabados mate, satinado y brillante son opciones versátiles que pueden aplicarse tanto a barnices como a pinturas, dependiendo del tipo de acabado que se busque en la pieza.

El acabado mate proporciona un toque rústico y natural, al no reflejar la luz, lo que permite que la textura de la madera se vea de forma más sutil. Este acabado es perfecto para quienes prefieren una estética más discreta y orgánica. Se puede utilizar para que otras partes de una pieza con diferente acabado destaquen más. Hay que tener en cuenta que el acabado mate es menos lavable y más manchadizo que otros.

El acabado brillante es más pulido y reflectivo. Al reflejar más luz, el acabado brillante da a la madera un aspecto más refinado, siendo ideal para aquellos que buscan resaltar las piezas de alto nivel, como en los detalles en wengé o sapelli. Este tipo de acabado no solo embellece la superficie, sino que también la protege eficazmente contra arañazos y manchas, haciendo que sea perfecto para piezas que se usarán con frecuencia.

El acabado satinado ofrece un equilibrio entre el mate y el brillante, proporcionando un ligero brillo que resalta las vetas de la madera sin ser demasiado reflectante. Es muy popular para maderas como el roble o el cerezo, ya que realza sus colores y texturas, aportando un acabado elegante. Este acabado también es ideal cuando se busca una protección adicional contra el desgaste sin perder la sensación natural de la madera.

El acabado al aceite es una opción popular para las maderas estructurales, ya que nutre la madera y resalta su belleza natural. Este acabado penetra profundamente en las fibras de la madera, proporcionando protección sin formar una capa superficial gruesa. El aceite resalta la las vetas de la madera, dándole un acabado aterciopelado al tacto. A diferencia de los barnices o lacados, el aceite permite que la madera conserve un aspecto más natural, lo que lo hace ideal para quienes buscan una apariencia más rústica o tradicional sin perder la protección contra el desgaste.
Como nota adicional habría que decir que, en el caso de los kits de batería, «lacado» implica que se utiliza barniz tintado, por lo que se puede ver la veta de la madera. También está disponible el color «madera» , en caso de que quieras un lacado transparente. Además está disponible el tratamiento del interior de los cascos con aceite.